Un Sueño Olímpico

Z i o n ?


La verdad está cerca, demasiado, cada día que pasa lo vivo más intensamente, perdido dentro de miles de videos, leyendo páginas y artículos, disertando que es verdad y que no la es, esta ahí, está ahí para ser consumida, para alimentarse de ella, nutrirse de lo que va a venir, si bien las señales están hacia donde miremos, quiero creer que estoy equivocado, pero muy dentro mío se que puede ser hoy, mañana o pasado, pero no muy distante. Si bien pareciera que perdí un tornillo, siéntensen y lean, tal vez perdí dos.

Alguien un día me contó en susurros un sueño, era tan irreal que jamás dudé de su verdadero significado, tal vez, porque aquel sueño era un viejo conocido.

Si bien en el pasado tuve sueños significativos, la mayoría siempre fueron basados en el miedo, tal vez por la edad prematura. De pequeño soñé estar sentado en el regazo del Diablo, me acuerdo perfectamente de la mesa verde de patas amarillas a medio servir en el medio del comedor, me acuerdo de un brasero que él sostenía en su mano izquierda y el calor que sentía en mi rostro... ahí no terminaba, éste me hablaba, no lo podía oír, parecía una película de Charles Chaplin sin subtítulos, petrificado y en silencio observaba a mi alrededor y todo parecía normal, era mi casa. Creo que esa noche rompí el silencio a gritos. Un tiempo después, justo para mi cumpleaños se hizo realidad aquel sueño, la escena fue idéntica, salvo que no era el Diablo, era mi padrino.

A principios de este año algo cambió dentro de mí y todo tiene que ver con un sueño, al despertar sonreí, pocas veces recuerdo lo soñado, pero los detalles de este eran únicos, si bien podía ser la mejor representación teatral al mejor estilo broadway, un estruendo volatilizó mi inconciente, si bien siempre tuve una imaginación poblada de locura, aquella quimera me superó ampliamente. Estuve a punto de contarla en su momento, pero creí que no era el tiempo, mi tiempo, la deje deslizar entre familiares en tono gracioso, como quién cuenta una historia de amigos cómplices en risas.
Si bien el sueño lo consumí inconcientemente como si fuera una parodia del fin del mundo, si, leiste bien, dije fin del mundo, pero la palabra principal hace radio en parodia, porque al despertar estaba feliz, no sentí miedo, ni desesperación. Me llevó tiempo llegar a una conclusión seria del mismo, después lo entendí, gracias al viejo refrán "las mejores verdades se dicen en broma", trague saliva. Sos guacho eh!



El tiempo pasa, pareciera que cada vez más rápido, me volví a sorprender con otro sueño amigo.

Años atrás, tratando de entender como se creaban los sueños o de dónde venían, leí un libro de Sigmund Freud que trataba de la Condensación de los Sueños, en el cual él daba una detallada explicación de como se formaban.
Prueben esto, piensen durante varios días en alguien o algo, concentren sus pensamientos varias veces al día en esa persona u objeto, traten de elegir algo que deseen con mucho fervor, algo que sea muy importante en su vida. El resultado será que tendrán un sueño sobre la persona u objeto.
Esto decía Freud o creí entender desde mi humilde visión, el cerebro acumula información todo el tiempo y jamás descansa, aunque estemos en estado de reposo, o sea, durmiendo. El sueño se produce por la Condensación del Inconciente, que es la suma de la información que tiene el cerebro, más las vivencias diarias que nos afectan de mayor o menor medida, las ansiedades más los deseos emocionales que a veces se encuentran postergados inconcientemente. De ahí que el cerebro se encarga de crear nuevas realidades o escenarios posibles, por eso a veces decimos "deja vú", esto ya lo viví!, la verdad es que el cerebro se adelanto a nosotros y creo una pequeña brecha al furuto, pero a la vez infinitas posibilidades de descenlace.
Hice ésta explicación de Freud, porque en los últimos seis meses no estaba pensando sobre el tema, ni mucho menos leyendo sobre el próximo sueño a desarrollar.


El sueño es bastante raro, sólo hay una persona delante de mí, es un hombre, un efecto ojo de pez rodea la silueta que apenas emana de la oscuridad, puedo ver su vestimenta, un traje, intento ver el rostro y más centro mi vista, más se desvanece la imagen.

Ya despierto y con el correr de las horas, empiezo a recordar detalles del sueño y me puse a pensar en quién es éste hombre?, se me hace imposible recordar si vi o no su rostro. De tanto querer recordar perdí de vista el verdadero detalle, porqué aquel hombre llevaba un traje gris en la oscuridad?, de tanto repetirlo y repensarlo me ilumine, y pensé: "será el hombre de gris?", seguramente te estas riendo, pero los conocedores de las psicografias de Benjamin Solari Parravicini, el hombre de gris es el que traerá paz a la Argentina, si bien no se todos los detalles, lo primero que hice fue googlear mientras se me venía el recuerdo a la mente, bien fresquito, la psicografia de BSP de Japón y su desastre del "casual (o causal) 11" de marzo de 2011, la tragedia del "terremoto marítimo", y nuevamente me quedé pensando en ese sueño de verano.

En el próximo post, voy a seguir desmenuzando mi sueño y compartiendo lo que me encontre a primera vista en internet.